24 de mayo de 2009

La corona y el premio

Una pareja se acerca a la entrada del parque.
Él es muy alto y muy rubio y pálido. Ella parece cansada.
- ¿Entramos?
-Como quieras -la respuesta de la mujer es indiferente.
-Hermoso, ¿no te parece? Con los tulipanes, los farolitos y las banderas.
-Sí, realmente. Entremos.

2 de mayo de 2009

Volver a Gadea

Sólo un gato vagabundo lo ve luchar tor­pemente con la oscuridad y con el llavero que parece una hidra de cien cabezas rebeldes. Al fin, Iván logra entrar a la casa. Pasan él, las tres docenas de rosas rojas y la valija abarrotada.
La puerta cancel estaba abierta. A pesar de todo, Gadea lo espera. Por ahora dejará el equipaje en el zaguán hasta que los dos se hayan reconciliado.