21 de febrero de 2012

Confesión

-Contraje matrimonio con ese hombre -declaró la mujer frente al juez- porque era época de epidemia y sólo quedaban vacunas contra la gripe.




e-Nanos


Macedonia Ediciones-Morón, agosto de 2010

5 de febrero de 2012

Zorro, zorro

Había un zorro al que le gustaba merodear por las huertas a la hora de la siesta. Una tarde encontró una vid cuyas uvas estaban en sazón. Se paró sobre las patas traseras y se estiró al máximo para alcanzarlas, pero se encontraban muy altas. Intentó con un salto y otro y otro más. Fue en vano, no llegaba.
La vid, compadecida del zorro y en medio del crujido de la madera y de la resistencia de los zarcillos que permanecían adheridos al espaldar que la sustentaba, dobló su tronco. Perdió unas cuantas hojas y racimos pequeños, pero el zorro pudo saciar largamente su sed.
Cuando este por fin terminó, mientras se relamía el hocico, dijo:
- ¡Qué lástima! Creí que serían más dulces.

e-Nanos

Ed. Macedonia, Morón, 2010